Francia es una de las principales potencias industriales del mundo. Su economía es la séptima del mundo y la tercera de Europa por detrás de Alemania y Gran Bretaña. El sector servicios es el que más aporta al PIB nacional (80%). Por lo tanto, si tiene las habilidades adecuadas, encontrar trabajo en Francia no es difícil, considerando que la tasa de desempleo, para 2022, debería rondar el 7%.
Encontrar trabajo en Francia
Para encontrar trabajo en Francia, los dos sitios más utilizados son:
- Pole employ, (para trabajos de cualificación media-baja)
- Apec, (para trabajos altamente calificados)
Puedes buscar aquí las ofertas de trabajo que te interesen, en función de tu titulación, y enviar tu CV directamente a las empresas.
Al buscar trabajo en Francia, las primeras preguntas que debes hacerte son:
¿Qué trabajo buscas?
¿Qué calificaciones tienes?
¿Cual es tu nacionalidad?
¿Hablas francés y en qué nivel?
Como en cualquier otro país del mundo, la facilidad para encontrar trabajo en Francia también dependerá de tus habilidades y conocimiento del idioma. Si tienes buenas habilidades profesionales y un buen conocimiento del francés te será fácil encontrar trabajo, de lo contrario será más difícil.
Ten en cuenta que para los ciudadanos de la UE que saben francés, encontrar trabajo es mucho más fácil que para los inmigrantes que vienen de países no pertenecientes a la UE. En Francia, en lo que respecta al trabajo, se da preferencia primero a los franceses, luego a los ciudadanos de la UE y finalmente a todos los demás.
La zona geográfica del país también es importante, de hecho algunas profesiones son más demandadas en unas zonas y menos en otras, así que antes de mudarte te recomiendo que consultes las regiones de Francia donde tu profesionalidad es más demandada.
París no es solo la capital administrativa de Francia, sino también la capital financiera y económica del país. Muchas empresas francesas, de todos los tamaños, tienen su sede en Défense, el enorme distrito financiero de París, uno de los más grandes de Europa, comparable a la City de Londres.
En Francia, la práctica de recomendar está muy extendida, por lo que si conoces a alguien que pueda recomendarte a la empresa, tendrás muchas más posibilidades de que te contraten.
Si no sabes francés, los únicos trabajos que puedes encontrar, (excepto los del sector de TI), serán trabajos ilegales y/o mal pagados como limpiadores, lavaplatos en algunos restaurantes o peones/albañiles en algunas obras de construcción.
En Francia existe un salario mínimo, previsto por ley, que a partir del 1 de mayo de 2022 se fija en 10,85 €/hora, lo que corresponde a un salario mínimo bruto mensual, para un trabajo a tiempo completo, de 1645,58 €.
Trabajos más demandados en Francia
Los trabajos más demandados en Francia se encuentran en los siguientes sectores:
TI: todos los roles relacionados con el sector de la tecnología de Internet
Personal sanitario: médicos, enfermeras, asistentes domiciliarios, etc.
Conductores: camioneros, conductores de autobuses, etc.
Trabajadores de logística: mensajeros, almacenistas, etc.
Turismo: Francia es el país más visitado del mundo, con casi 90 millones de turistas al año, por lo que siempre hay demanda de empleo en el sector de la restauración y la hostelería
Cultura laboral en Francia
Francia es un país muy diverso tanto geográficamente como culturalmente. Pero la cultura laboral es bastante similar en todo el país y el ritual de dar la mano a todos los colegas cuando llegan a la oficina está en todas partes.
Los trabajadores difícilmente realizan horas extras, a menos que existan situaciones de emergencia y a la hora programada, todos abandonan el lugar de trabajo. Si alguien se queda a trabajar fuera de horario, no se lo ve de manera positiva, sino que se le considera como alguien que no puede organizar su trabajo.
Incluso si los descansos en el trabajo son frecuentes, los franceses saben administrar perfectamente sus tiempos de trabajo, no trabajan tanto para hacer que el tiempo pase, sino que siempre trabajan para el resultado final y durante las horas de trabajo la gente está extremadamente concentrada en sus tareas y no pierden el tiempo charlando con colegas.
Así lo demuestra el hecho de que la productividad de los trabajadores franceses es también superior a la de Alemania e Inglaterra.
El almuerzo, para los franceses, es sacrosanto, es muy raro ver a alguien comiendo en el escritorio, muchas empresas incluso prohíben esta práctica y las empresas están obligadas por ley a proporcionar a los empleados vales de comida para gastar en restaurantes afiliados.
Las vacaciones para los franceses también son algo a lo que no se puede renunciar, la mayoría de los trabajadores disfrutan de muchos días libres, incluso más de 40 días al año.
Un aspecto que caracteriza a los franceses es su amor por las reuniones: reuniones para preparar reuniones, reuniones reales y reuniones para evaluar el resultado de las reuniones.
En conclusión, la cultura y el entorno laboral franceses garantizan un buen equilibrio entre el trabajo y la vida privada. Las cinco semanas de vacaciones al año, de media, que disfrutan los trabajadores franceses junto con los fines de semana son momentos en los que la gente puede desconectar y volver a trabajar con energías renovadas.
La creencia de que los franceses siempre se inclinan a la huelga porque no quieren trabajar también es una falsedad. Los trabajadores siempre hacen huelga solo para proteger los derechos que han adquirido con esfuerzo y que no están dispuestos a abandonar.
Encontrar trabajo en Francia, conclusiones
En conclusión, podemos decir que el salario mínimo en Francia es uno de los más altos de Europa. La edad de jubilación es una de las más bajas del mundo, de hecho, es posible jubilarse del trabajo con solo 62 años. Las protecciones que disfrutan los trabajadores son altas. La semana laboral es de 35 horas, lo que combinado con 6 semanas de vacaciones al año significa que los trabajadores franceses tienen mucho tiempo libre para dedicarlo a sus hobbies o familia, lo que les permite tener un excelente equilibrio entre el trabajo y la vida privada.
